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Gallardo – Humanizados

Etiquetado: Gallardo

Mercedes Savall

Artista de pura cepa, de muy pequeña descubrió su vocación: la escultura. Obtuvo considerable popularidad al realizar las imponentes estatuas de los ídolos riverplatenses: Ángel Labruna y Marcelo Gallardo. Pero detrás de ese orgullo profesional, vivió diversas partes del proceso como una pesadilla, con dificultades y presiones que repercutieron en su salud física y emocional, y le ocasionaron apuros económicos. Humanizamos a Mercedes Savall, ser con luz propia. 

Guido Rodríguez

Fue padre muy joven. No pudo tener continuidad y asentarse en River. En Defensa y Justicia, de la mano de Ariel Holan, tuvo su despegue definitivo. En México fue el jugador sensación, alcanzando un nivel de altísimo vuelo lo que le abrió la puerta a la Selección. Hoy en el Betis de Manuel Pellegrini es uno de los volantes más eficaces y con mejores estadísticas de La Liga. Un centrocampista de los de antes: pensante, criterioso, simple, con jerarquía para la recuperación y elegancia con la pelota para distribuir juego. Humanizamos a Guido Rodríguez, un pibe con los pies sobre la tierra.

Paulo Ferrari

Jugó en solo dos equipos, muchos años en cada uno, con gran regularidad y buen nivel; demostrando lealtad, respeto y pertenencia hacia la institución que representaba. Nunca priorizó el ´salvarse económicamente´. Es uno de los defensores más goleadores de la historia de River. Compartió un mismo vestuario con Ortega, Gallardo y Almeyda. Estando como coordinador de las inferiores de Rosario Central, le pidieron que se haga cargo técnicamente de la Primera en un complejo momento, y a los ¡20 días! lo echaron. Humanizamos a Paulo Ferrari, un tipo simple.